El mantenimiento de tableros eléctricos es un proceso fundamental para asegurar su correcto funcionamiento, además de prolongar la vida útil de los equipos y evitar costosas reparaciones.
Existen diversos tipos de mantenimiento aplicables en estos componentes: preventivo, que busca evitar fallas futuras, predictivo, para detectar posibles fallas y tomar las medidas requeridas y correctivo, que se ejecuta una vez que se ha producido una avería.
Además del tipo de mantenimiento, es importante considerar factores como la seguridad, eficiencia y la frecuencia de la inspección.
En este artículo, te traemos 10 tips para garantizar el mantenimiento preventivo de tus tableros eléctricos de forma segura, eficiente y con los mejores resultados.
10 Consejos para el mantenimiento de tableros eléctricos
1. Desconexión segura
Antes de iniciar cualquier trabajo, es esencial asegurar el corte de la fuente de alimentación general del tablero y confirmar que no hay tensión.
Con la ayuda de un voltímetro, verifica que no haya voltaje en los circuitos del tablero; haz varias mediciones para verificar que el sistema esté completamente desconectado.
Luego, identifica los circuitos (con ayuda de un diagrama eléctrico o un probador de circuitos) y procede a su desconexión; apaga cada disyuntor de forma individual.
También, ten en cuenta el uso de dispositivos de bloqueo y etiquetado (para evitar que alguien encienda accidentalmente la energía) y contar con el equipo de protección personal (EPP) adecuado: guantes aislantes, calzado y gafas de seguridad, etc.
2. Inspección regular
Comprueba que las características físicas del tablero coinciden con lo señalado en el diagrama unifilar e inspecciona que sus componentes no presenten daños visibles: grietas, roturas, decoloración, piezas flojas o sueltas, etc.
En el caso de existir piezas flojas, asegúrate de reajustarlas de forma adecuada o bien, sustituirlas si es necesario.
Asimismo, verifica que no haya signos de sobrecalentamiento de los conductores de acometida y que todas las conexiones estén firmes y sin corrosión. También, confirma que las etiquetas sean legibles y estén en el lugar correcto.
3. Limpieza periódica
Utiliza una aspiradora industrial (con boquilla adecuada) o una brocha para eliminar el polvo y la suciedad acumulados entre el tablero, los cables y los interruptores.
Para la limpieza de los contactos, usa un limpiador de contactos eléctrico para eliminar la oxidación y mejorar la conductividad.
También, ten en cuenta la limpieza de las entradas naturales de ventilación (si las hay). En caso de ventilación forzada, limpia las aspas y verifica que estas giren libremente.
4. Revisión de conexiones
Verifica que las borneras de conexión de los interruptores y dispositivos existentes estén bien ajustados y en buen estado, para asegurar una buena conexión eléctrica.
Además, valora si alguno tiene rastros de calentamiento y de ser así, toma nota para una visualización más profunda.
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5. Verificación de componentes
Comprueba que los interruptores automáticos funcionen correctamente, que no estén atascados y que exista continuidad eléctrica entre los cables y la estructura del tablero:
- Confirma la calibración de los interruptores termomagnéticos y que no estén desgastados.
- Reemplaza los fusibles quemados por otros del mismo valor.
- Asegúrate de que los contactores estén funcionando correctamente.
6. Pruebas eléctricas
Realiza mediciones de resistencia de aislamiento, continuidad y polaridad. Utiliza equipos de medición adecuados (megger, multímetro).
7. Revisión de sistemas de protección
Efectúa pruebas periódicas a los sistemas de protección contra sobretensiones y a los Dispositivos de Protección Residual (RCD’s), para comprobar su estado y funcionamiento óptimo en caso de detectar una subida de tensión o una fuga de corriente, respectivamente.
8. Documentación
Lleva un registro detallado de las actividades de mantenimiento ejecutadas, incluyendo fechas, medidas correctivas y demás observaciones.
9. Restauración de la energía
Antes de restaurar la energía, realiza una última revisión para comprobar que no haya herramientas ni materiales dentro del tablero.
Luego, retira los bloqueos de seguridad y reactiva la energía de manera segura.
10. Pruebas finales
Una vez que el tablero esté energizado, verifica que todos los circuitos y dispositivos conectados funcionen correctamente. Supervisa el mismo durante un tiempo, para asegurarte de que no haya problemas.
La frecuencia del mantenimiento dependerá de varios factores, como el tipo de instalación, la carga eléctrica y las condiciones ambientales. Lo recomendable es efectuar inspecciones visuales al menos una vez al año y mantenimientos más exhaustivos cada 2 o 3 años.
Al realizar cualquier tipo de trabajo en un tablero eléctrico, es fundamental cumplir con las normas de seguridad establecidas y las regulaciones locales.
En el caso de Chile, la Norma Chilena Eléctrica (NCh Elec) y sus regulaciones NCh Elec 4/2003, NCh 350, los Pliegos Técnicos Normativos RPTD, como el RPTD N°15 y el Decreto DS N° 594/2000, forman parte de la normativa de interés
¡Recuerda!
El mantenimiento de tableros eléctricos debe ser realizado por personal calificado y autorizado.
En Ematec, contamos con un equipo de profesionales y técnicos comprometidos en entregar a nuestros clientes soluciones a la medida en las áreas eléctrica, mecánica y OOCC.
¡Confía en nuestros expertos y garantiza la seguridad y eficiencia de tus instalaciones con el mantenimiento adecuado de tableros eléctricos!
